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Jueves, 11 de julio de 2013   |  Número 69
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ACTUALIDAD
X REUNIÓN DE LA SECCIÓN DE INSUFICIENCIA CARDIACA Y TRASPLANTE DE LA SEC
Los nuevos tratamientos para IC reducen un 30% la mortalidad en los 3 primeros años
El trasplante es una de las opciones terapéuticas más eficaces para pacientes con IC avanzada, casi un 10 por ciento de los diagnosticados

Redacción. Madrid
El control de la insuficiencia cardiaca (IC) se está convirtiendo en uno de los principales retos de la medicina actual, no solo por el elevado número de personas que la padecen, el 6,8 por ciento de los mayores de 45 años y entre el 15 y el 20 por ciento de los mayores de 85 (según el estudio Price), sino también porque es la principal causa de hospitalización en nuestro país, lo que representa un importante porcentaje del gasto sanitario.

Nicolás Manito.

“El envejecimiento progresivo de la población y el aumento de los principales factores de riesgo cardiovascular (hipertensión, obesidad, diabetes, etc.) ha provocado que en los últimos diez años, la incidencia de esta enfermedad haya aumentado un 30 por ciento y se prevé que siga aumentando en los próximos años”, se lamenta Nicolás Manito, presidente de Sección de Insuficiencia Cardiaca y Trasplante de la Sociedad Española de Cardiología (SEC). “La hospitalización por IC supone el 70 por ciento del gasto sanitario de esta enfermedad, por lo que reducir las tasas de rehospitalización de los pacientes es un reto para los profesionales”.

Existen diversas opciones de tratamiento para la IC según su gravedad. El control de los factores de riesgo, la administración de fármacos vasodilatadores o de betabloqueantes, la realización de una angioplastia primaria o la implantación de un desfibrilador son algunos de ellos. “Cuando todos estos tratamientos no funcionan, o ante la IC avanzada que se da en el 10 por ciento de los casos, la única opción terapéutica que nos queda es el trasplante cardiaco, ya que el corazón del paciente es incapaz de bombear sangre en un volumen adecuado por sí mismo. Desgraciadamente, y tal y como muestra el Registro Español de Trasplante Cardiaco que presentamos en esta reunión, el número de trasplantes de corazón se está estancando en los últimos años (247 implantes en 2012 frente a los 354 del año 2000”, explica Manito. “Por suerte”, prosigue el doctor, “en los últimos años se están creando nuevos dispositivos mecánicos que tienen la capacidad de cumplir la función cardiaca”.

Existen diversos tipos de dispositivos de asistencia ventricular (AVM) según la función que deben realizar: como puente al trasplante cardiaco, para mantener al paciente con vida mientras llega un corazón; como puente a la recuperación de la IC, cuando se implanta como parte del tratamiento con el objetivo de que el corazón acabe de recuperar su capacidad normal; y como sistema de asistencia definitiva, en aquellos casos en los que es necesario un reemplazo del corazón, pero no se es candidato al mismo por alguna contraindicación.

“Aunque se ha demostrado la enorme utilidad de este tipo de dispositivos, su implantación en España está siendo lenta, especialmente por el alto coste derivado”, indica Manito. Así, uno de los temas que se han debatido en la X Reunión de la Sección de Insuficiencia Cardiaca y Trasplante de la SEC ha sido “la necesidad de crear grupos multidisciplinares en el tratamiento de la IC, llamados Heart Team. Este grupo de trabajo mejorará el abordaje de la IC, ya que permitirá obtener decisiones más eficientes, como es la selección del paciente idóneo para recibir este tipo de dispositivos. Lo consideramos como un proceso de control de calidad, lo que no solo mejorará el tratamiento a nuestros pacientes, sino también el control de los gastos sanitarios”, anuncia Manito.

Otro de los aspectos que han abordado los más de 300 especialistas congregados en Málaga, ha sido la necesidad de crear una acreditación de experto en Insuficiencia Cardiaca. “Debido a la importancia de la IC, tanto en su alta incidencia como en el enorme gasto sanitario que conlleva, creemos necesaria la creación de una subespecialidad en cardiología. Así, los médicos que traten esta enfermedad deberán acreditar o una formación especial o más de dos años de experiencia en una unidad de IC”, explica Manito.

Este año, por primera vez, se ha otorgado el premio ‘Insuficiencia Cardiaca a la trayectoria profesional’ a Eduardo de Teresa, jefe del Servicio de Cardiología del Hospital Universitario Virgen de la Victoria de Málaga, quien ha recibido este reconocimiento por su aportación a la terapia de resincronización cardiaca, pues fue el primer cardiólogo a nivel internacional, que realizó un artículo científico sobre los marcapasos tricamerales (aquellos que tienen tres cables -uno en la aurícula, otro en el ventrículo derecho y otro en el izquierdo y actúan mejorando la función de bomba del corazón).

 

 

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